reúne el Director General de la CDI con la tribu kikapú
El Nacimiento del Río Sabinas, municipio de Múzquiz, Coah., 23 de julio de 2009
Extraído de:
http://www.cdi.gob.mx
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Se invierten más de 74 millones de pesos, federales y estatales, en diversas obras de infraestructura que benefician a la Tribu Kikapú.
- Dialoga Luis H. Álvarez con el Jefe Chakoka Aniko, con mandos Kikapú asentados en territorio estadounidense y con las familias de la Tribu, a las cuales transmite el saludo del Presidente Felipe Calderón.
El Director General de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, Luis H. Álvarez, se reunió en este paraje con el Jefe de la Tribu Kikapú avecindada en México, Chakoka Aniko, y con representantes de agrupaciones establecidas en Texas, Estados Unidos, así como con familias de dicha Tribu, a las que comunicó el saludo cordial del Presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa.
Luego de escuchar palabras de bienvenida y de apreciar diversas expresiones de la historia y cultura de la Tribu Kikapú, Luis H. Álvarez, en un diálogo directo y franco, manifestó el respeto del Gobierno Federal por el historial de lucha, resistencia y perseverancia de un pueblo que ha desafiado a la adversidad para mantenerse en pie y buscar un desarrollo, incluyente de su identidad profunda.
Tras afirmar que el Gobierno del Presidente Calderón tiene la firme determinación de trabajar por el bienestar de los pueblos indígenas de México, sin distingo alguno, Álvarez evaluó junto con dirigentes y miembros de la Tribu los trabajos que se han realizado en su comunidad, a fin de mejorar sus condiciones de vida.
En ese sentido, destacó que de 2003 a la fecha, se realizó una inversión de más de 74 millones de pesos, aportados por los Gobierno Federal y Estatal, para la realización de las siguientes obras: ampliación y pavimentación del camino rural El Nacimiento-Múzquiz-Boquillas de Carmen, con una longitud total de 29 kilómetros; construcción de dos puentes vehiculares, uno de 61 metros de longitud sobre el arroyo Los Cojos, en el camino de El Nacimiento, y otro sobre el arroyo Barranco Azul, con una longitud de 13 metros.
Asimismo, se construyeron 80 sanitarios; se amplió la red de distribución de energía eléctrica en la zona norte y se concluyó el cobertizo taller de la Tribu.
El Director General de la CDI destacó que con esas obras y la continuidad del trabajo conjunto de la Tribu Kikapú y el Gobierno de la República será posible elevar los índices de desarrollo humano de sus miembros, al tiempo que se realizan acciones para preservar y difundir su valioso legado cultural.
Por su parte, el Jefe Chakoka Aniko expresó el agradecimiento de la Tribu por las acciones de apoyo del Gobierno Federal y el Estatal, a la vez que consideró un honor la visita del Director General de la CDI, porque “tú representas a todos los hermanos indígenas de México y te has sabido ganar nuestro corazón y nuestra amistad”.
Asimismo, subrayó: “Todo lo que hagan por los kikapú es igual que si lo hicieran por el mundo, porque nosotros somos los cuidadores del mundo y esa es nuestra misión”.
Por su parte, el Secretario de Obras Públicas y Transporte del Gobierno del estado de Coahuila, Horacio de Jesús del Bosque Dávila, manifestó la disposición del Gobernador Humberto Moreira Valdés para trabajar coordinadamente con la CDI y con la Tribu Kikapú para continuar realizando acciones en su beneficio.
Participaron también en el encuentro, el Director General del Instituto Nacional de Lenguas Indígenas, Fernando Nava López, y el Presidente Municipal de Múzquiz, Jesús Iván González Nájera.
Acompañaron a Álvarez en reunión con la Tribu Kikapú, el Delegado de la CDI en Durango (encargado de la cobertura de atención indígena en Coahuila), Salvador Castañeda Rangel; el Responsable del PIBAI de la Delegación Durango, Roberto Galindo Novelo; el Coordinador General de Programas y Proyectos Especiales, Janitzio Durán Ortegón, y el Director General del Programa de Infraestructura Básica para la Atención de los Pueblos Indígenas, Javier Camacho Hinojosa.
Tribu Kikapú
Los Kikapú se llaman a sí mismos kikaapoa, que significa “los que andan por la tierra y cuidan al mundo”. Son originarios de la región de los Grandes Lagos, entre el lago Michigan y el lago Erie, al sur del actual estado de Michigan, Estados Unidos, donde vivían antes de la llegada de los europeos.
Debido a la colonización y guerras de exterminio en el vecino país, fueron expulsados de su territorio original. La Tribu se fragmentó y hasta la fecha hay asentamientos en diversas partes de Estados Unidos y en nuestro país.
En 1850 una parte de la Tribu Kikapú, junto con grupos de indios seminoles y mascongos, bajo el mando del Jefe Seminol Wild Cat, pidieron al Gobierno de México permiso para asentarse en lo que hoy es el estado de Coahuila, a cambio de defender la frontera contra los ataques de comanches y apaches.
Así, cruzaron el Río Bravo y se establecieron en territorio mexicano, en El Nacimiento del Río Sabinas, ubicado en el municipio de Múzquiz, en la zona carbonífera, a poco más de 150 kilómetros de la frontera norte de México.
La lengua Kikapú pertenece a la familia algonkiniana, originaria de las tribus que habitan en el actual territorio de los Estados Unidos de América, y la hablan todos los miembros de esta comunidad como lengua de uso exclusivo para comunicarse entre ellos, ya que la mayoría conoce y habla el inglés y el español.
Tienen dos tipos de vivienda: casas indias (una de invierno y una de verano) construidas de forma elíptica con una estructura de troncos delgados y grandes tapetes de tule y casas mexicanas construidas a base de materiales tradicionales como el ladrillo.
Su producción artesanal consiste en la elaboración de ropa tradicional a partir del curtido de pieles de venado y la fabricación de tehuas o macasines, mitazas o pantalones, adornadas con detalles ornamentales de chaquira.
Las ceremonias comunales reúnen tres elementos: la caza, la misa y la danza.
La cacería tiene un carácter ritual y se realiza de manera grupal durante el año, sobre todo en el contexto de festividades religiosas, este rito siempre va acompañado de carne de venado, animal que representa el centro de la vida Kikapú.
Las autoridades tradicionales reconocen a un jefe o capitán de la Tribu, que es al mismo tiempo sacerdote.
El Nacimiento es el lugar sagrado de los kikapú, adonde llevan a sus muertos para enterrarlos y efectuar sus ceremonias; también es el espacio que necesitan para sentirse libres, descansar y seguir sus tradiciones.
En El Nacimiento, la autoridad máxima es el jefe de la tribu, a quien el Gran Espíritu o Kitzigiata, le da la fuerza para gobernar, es decir, lo enviste como jefe y sacerdote.
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